Talasoterapia

Con alguna osadía podríamos decir que el uso de las virtudes tonificantes y regenerativas del océano nació desde el mismo momento en que la vida fue posible sobre la Tierra en este medio, y solo fue posible en este.

TALASOTERAPIA^® es el nombre dado al arte de utilizar agua del mar, sus sales, y las algas marinas para obtener resultados terapéuticos. La palabra proviene del Griego THALASSA que significa OCÉANO, y originalmente se refería a realizar un viaje al mar para curar alguna enfermedad. La palabra fue acuñada por el Médico Francés Bonnardiere, quien aconsejaba a sus pacientes obtener aire marítimo para mantener la buena salud.

Lo cierto es que aún hoy día sentimos todos la necesidad de refugiarnos en centros de recreo junto al mar, y existen numerosos sitios adonde el agua de mar es utilizada para rehabilitación física y fines cosméticos. Ejemplos de esta realidad son los numerosos Spas en las costas de Francia, Alemania, Yugoslavia, Bélgica, España, Italia, y el Mar Negro. En estos lugares se utilizan interna y externamente todos los recursos del mar para lograr efectos terapéuticos.

Y si observamos que estos centros, lejos de tener una magra supervivencia son cada vez más grandes y numerosos, podemos concluir que los remedios ahí aplicados sencillamente funcionan.

TALASOTERAPIA^® es entonces el uso tradicional- no siempre substanciado médica y científicamente, pero de una gran confiabilidad y beneficios comprobables - de baños con agua de mar fría o caliente; de agua de mar con algas marinas suspendidas; masajes o tracción mecánica con algas y agua de mar; y la ingestión en diversas formas y presentaciones de estos mismos elementos.

Los padecimientos a los que mas frecuentemente se aplican con éxito estos procedimientos, y que le han dado a la TALASOTERAPIA^® la fama de que goza, son: artritis, reumatismo crónico, asma, heridas, ulceraciones, eczema, soriasis, hemorroides, obesidad, neurosis, síndrome del estrés, rehabilitación, envejecimiento, entre otros.

Al irse incrementando nuestro aún incipiente acervo sobre el océano se irán incrementando sin duda alguna las verificaciones del conocimiento tradicional en TALASOTERAPIA^®.

RELACIÓN DEL MAR CON LOS FLUÍDOS CORPORALES.

La Sal y el Agua , lo mismo que la luz y el aire, son algo mas que alimento: SON LA ESENCIA MISMA DE LA VIDA.

Desde que la vida emergió en el océano primitivo, las células animales han estado sumergidas en agua de mar. Los científicos especulan que hace al menos 3.5 mil millones de años que la vida comenzó en un océano cálido, bajo la apariencia de organismos unicelulares. El agua de ese océano era su sangre, llevándoles los nutrientes y el oxígeno, y llevándose sus deshechos. Lentamente estos organismos unicelulares evolucionaron en organismos complejos multicelulares, pero continuaron dependiendo del medio que les rodeaba, no solo como soporte físico sino como medio de obtención de nutrientes y desalojo de deshechos.

Una vez que la complejidad evolutiva les aisló del océano-sangre que les rodeaba, debieron hacerlo circular internamente para proveerse de las mismas funciones vitales. Los mecanismos exitosos de adaptación a esta nueva condición de llevar en si mismos el medio oceánico, fuente de toda vida en el planeta, les permitió abandonar el mar primigenio y conquistar el medio terrestre.

Si observamos al ultimo peldaño de la evolución: al ser humano, se mira con mucho diferente de la célula ancestral; pero si nos asomamos a sus células individuales, nos encontramos con que estas aún viven en las mismas condiciones. Nuestros fluidos corporales tienen esencialmente la misma composición que la del océano gestacional, y nuestros 75 trillones de células continúan recibiendo nutrientes y oxígeno, y excretando deshechos, en la misma forma.

         Aún mas, podemos atisbar a todo el proceso evolutivo al darnos cuenta de lo que sucede cuando el óvulo y el esperma se encuentran en una solución salina y dan comienzo a una nueva vida. En ese momento nuestro cuerpo arranca como un organismo unicelular y comienza a crecer, bañado por el medio marino llamado fluido amniótico, atravesando diversas etapas evolutivas. En el momento en que nuestros ancestros abandonaron la vida marina, llevándose consigo el medio marino del que surgieron, ese océano estaba mucho menos concentrado que en el presente. Y esta es la razón por la cual nuestra sangre y fluidos corporales no son tan salados como el océano actual. Y lo mismo sucede también con organismos marinos complejos como peces e invertebrados. Pero aún así, los mismos elementos iniciales siguen siendo la formula vital: AGUA Y SAL, presente en todos nuestros fluidos - sangre, linfa, moco, orina, sudor, lagrimas, saliva, etc. Y al perder estos fluidos también perdemos sal, por lo que es necesario reponerla. De este hecho fundamental se desprende el beneficio de la TALASOTERAPIA, ya que con sus elementos terapéuticos no se hace otra cosa que renovar y vitalizar el océano interior para que la vida no solamente continúe, sino que encuentre el medio mas propicio para continuar su evolución.